El proyecto offshore Fénix recibió amplios apoyos en Audiencia Pública

El proyecto offshore Fénix recibió amplios apoyos en Audiencia Pública.

En la Audiencia Pública por el proyecto Fénix, de gas offshore, recibió el
apoyo de entidades técnicas, empresas de la cadena de valor y la sociedad civil.
Las exposiciones de representantes de entidades civiles e instituciones expresaron respaldo a la ampliación de la actividad energética en el Mar Austral
“Fue masivo el respaldo que obtuvo ayer, en la Audiencia Pública 1/23 organizada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, la ampliación de la actividad hidrocarburífera que desde hace más de cuatro décadas se lleva a cabo en la Cuenca Marina Austral (CMA-1)”, destacó el IAPG.
El Proyecto Fénix consiste en aumentar la producción en ese yacimiento de gas ubicado en la Cuenca Austral, a 60 km de la costa, y a una profundidad del agua de 70 metros (aguas someras) a través de la instalación de una plataforma; la perforación de 3 pozos horizontales; la construcción de un gasoducto de 36.5 km entre la plataforma existente -Vega Pléyade- y la plataforma a construir; y
todo ello en un período de explotación estimado de al menos 20 años.

Se espera que la producción de este proyecto aporte hasta 10 millones de metros cúbicos de gas/ día, que serán suministrados al mercado nacional, representando entre el 8% y 10% de la producción actual de gas del país
aproximadamente.

Como es el procedimiento en estos casos, los proyectos son revisados antes por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, el cual somete la propuesta a la exégesis y debate abiertos a la opinión pública. Si bien el resultado no es vinculante, sí marca la temperatura general de cómo se reciben estos proyectos en la comunidad.
En el caso de la AP 1/23, de acuerdo a lo expresado por la Directora Nacional de Evaluación Ambiental, Jessica Motok, fueron algo más de 300 personas las que tomaron la palabra.

Y un primer recuento, en función de lo expuesto durante la jornada, indica un respaldo al proyecto del orden del 80%.
A las voces de las máximas autoridades de aplicación nacionales y provinciales que expresaron su apoyo al proyecto desde la mañana -la Secretaria de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e
Innovación, Cecilia Nicolini; la Secretaria de Energía, Flavia Royón; y el Subsecretario de Hidrocarburos, Federico Bernal, se sumaron sus pares de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del
Atlántico Sur Alejandro Aguirre, Secretario de Estado de Hidrocarburos y Sonia Castiglione, Ministro de Ambiente y Producción.

También se escucharon apoyos al proyecto por parte de entidades civiles y laborales, además de testimonios personales.
A favor de la actividad, Sandra Cipolla, representante de la Asociación Bonaerense de la Industria Naval (ABIN), dijo claramente que “es imprescindible tener en cuenta que la evolución y
sustentabilidad de un país están ligadas a la disponibilidad y producción de energía para satisfacer las necesidades de desarrollo de la estructura productiva. Sin energía abundante y proporcionada en todo momento no habría posibilidades reales de crecimiento”.

“Creemos que este proyecto podría contribuir para que avancemos en la transición energética en base a nuestros recursos disponibles, capacidad y nuestras propias necesidades de desarrollo”, agregó Cipolla.
Desde CADE, CCIFA, CEPH e UIA se destacó que el gas natural aportado por Fénix se traducirá en un ahorro sumamente significativo en la importación de LNG y gas de Bolivia.
Néstor González, Intendente municipal de Puerto Santa Cruz, puntualizó: “Quiero manifestar el apoyo de la comunidad de Puerto Santa Cruz al proyecto Fénix que, entre otras cosas, va a reactivar el Puerto
Punta Quilla. Este puerto es la esperanza que tiene el pueblo de Santa Cruz desde hace más de cuarenta años para el desarrollo regional y de nuestra localidad, donde Total Austral está presente
trabajando y manteniéndose de manera constante en nuestra localidad”.
Por su parte Verónica Tito, consultora legal de la Secretaría de Energía de la Nación, indicó que “esta actividad, realizada con los más altos estándares y con el control y la fiscalización ambiental correspondiente, acorde a la normativa vigente nacional e
internacional, corresponde, es oportuna y necesaria”.
Como consultora de Resilience y asesora de C.A.Pe.C.A., Sofía Wöhler dejó claro que “no es de interés del sector pesquero obstruir la actividad”: antes bien, “lo que se pretende es que se desarrolle, siguiendo los más estrictos estándares en materia de seguridad ambiental.”
Martín Kaindl, director de Relaciones Institucionales y Administración IAPG sostuvo que “la industria del petróleo y del gas cuenta con la tecnología y los recursos humanos altamente capacitados que permiten llevar a cabo este tipo actividad con altos estándares de seguridad ambiental y operativa”.
En esa línea, Fernando Halperín, Coordinador de Educación del IAPG, recordó que “se trata de un proyecto que busca incrementar la producción de gas natural, en un país cuyo principal componente de la matriz energética es el gas natural. Necesitamos el gas natural para casi todo”.
Posteriormente, Pablo Amoedo, Gerente de Proyectos de la Asociación de Empresas de Petróleo, Gas y Energía Renovable de América Latina y el Caribe (ARPEL),
apuntó que “lo que estamos atravesando no es un reemplazo sino una transición: no existe escenario de descarbonización que excluya la participación de los hidrocarburos en la matriz energética”.
No lejos de esa línea, Marcelo Güiscardo, Presidente del Cluster de Energía de Mar del Plata, aseguró que el Proyecto Fénix es realmente muy valioso para los argentinos: una inversión de 700 millones de dólares de una empresa que ha apostado a este país desde hace más de 40 años”.

En referencia al potencial impacto de la actividad, Marcelo Bombicini, en representación de la empresa Pan American Sur, exptesó que “nada antrópico es 100% inocuo: tampoco la pesca ni la
navegación, pero mientras se haga bajo los planes de gestión ambiental para mitigar cualquier impacto que se pueda producir y se controlen como se viene haciendo hace 45 años, el proyecto es perfectamente viable. No encuentro ninguna objeción ni legal ni técnica para el desarrollo de este
proyecto”.
En el plano de las declaraciones en nombre propio, Gabriela Roselló pertenece a la industria, y habló a título personal al desestimar los temores a incidentes mayores. “La presencia histórica de Total Austral en la Cuenca Austral demuestra que la convivencia de manera armónica de estos proyectos con el cuidado del medio ambiente es posible”.
Detalló que “el Proyecto Fénix se enmarca en los compromisos de Argentina a nivel internacional en la materia y su producción contribuirá junto con los renovables a fortalecer una matriz energética baja
en emisiones”, y concluyó: “proyectos como éste aportan a la soberanía energética del país y tornan más concreta la posibilidad de la Argentina de ocupar un rol protagónico como proveedor de energía
al mundo”.
También buscando alejar temores de incidentes, el abogado experto en el sector, Julio Fonrouge, argumentó que “se ha madurado en políticas de integridad, aquí con la ley 27401 y en el exterior, donde
están algunas casas matrices, estas empresas están mucho más desarrolladas y estos canales de denuncia están abiertos para todos. Y esos canales y la fiscalización de la actividad están abiertos para que no haya impedimento para el desarrollo”.
Natalia Scaricabarozzi, en carácter de simple ciudadana enfatizó que “nuestro país necesita energía. Es la base de toda la industria, de la generación de alimentos, del desarrollo agrícola, para generar trabajo, divisas y seguir sosteniendo a los millones de argentinos que vivimos aquí. Quisiera que usemos esta energía para crecer como país”.
Nestor Darwin Bolatti se desempeña en la empresa YPF y agregó al debate que “desarrollar el Mar Austral no solamente aporta conocimiento científico sino también seguridad energética y soberanía política”.
El consultir Daniel Ragazzini, reseñó que  participó en “las operaciones offshore durante la década del ‘80 y ‘90 en Tierra del Fuego. Convivimos con la naturaleza que nos rodeaba (ballenas, orcas, delfines y pingüinos) y jamás hemos visto un problema con la biodiversidad”.
Mariana Carla Etchart, de la empresa Mohn Drilling S.A. narró su experiencia como pyme al exponer que “contamos con los buzos, supervisores de buceo y técnicos más calificados de Argentina, siempre protegiendo y garantizando como prioritaria la mano de obra nacional, teniendo en cuenta los lineamientos
internacionales y siguiendo los más rigurosos estándares de seguridad”.
Francisco Javier Bogado desmitificó que no se hayan realizado informes científicos previos a este proyecto. “Este estudio tiene un contenido de mucho sustento de línea de base, con gran información de las últimas campañas de más de 10 años de campaña en el mar”.

En la misma sintonía, Humberto Benedetti, aseguró que le consta que la empresa operadora “desarrolla sus proyectos con los más altos estándares de seguridad, respeto y preservación al Ambiente”.

Pablo Camusso, licenciado en Relaciones Internacionales, anticipó que “lo que va a generar este proyecto es que Tierra del Fuego tenga una disponibilidad de gas que pueda empezar a soñar, empezar a desarrollar todo lo que es la industria petroquímica y de fertilizantes en la isla que geopolíticamente le va a dar un espacio, un poder a la provincia que nos va a poder, como argentinos, dar la sensación de una seguridad mayor geopolítica y geostratégica en la zona”.

El renombrado consultor Daniel Gerold de G&G Consulting, en tanto, afirmó que “el Proyecto Fénix es muy importante para ratificar la soberanía que tiene un país, porque un país tiene un mar continental extenso o amplio donde hay recursos, desde recursos de fauna marina, de pesca y también de hidrocarburos. Y los recursos están para utilizarlos y desarrollarlos y mostrar que un país puede darle valor al potencial que tiene, y no únicamente para dejarlos contemplando como desde hace millones de años sin que hubieran afectado al desarrollo humano.”

“Este proyecto Fénix tiene una relevancia mayúscula porque va a volver a restablecer el suministro en el gasoducto de San Martín, que hoy se encuentra, no diría vacío, pero con una capacidad de transporte y una inversión hundida muy considerable todavía, y donde es indispensable que se desarrolle más volumen de gas”, añadió.

En esa línea se expidió también Juan José Carbajales, hoy consultor y ex Secretario de Hidrocarburos de la Nación. “La cuestión geopolítica aquí es interesante por la proximidad de nuestras Islas Malvinas y el ejercicio de la soberanía. Cuando el país decide explorar y explotar sus recursos naturales, lo que está haciendo es demostrándole al mundo que la energía tiene un lugar relevante y que puede ser puesta en una mesa de negociación, para seguir reclamando, no sólo en foros diplomáticos sino de una manera concreta; y con esa presencia, seguir teniendo proyección hacia la Antártida”, afirmó.

Por su parte, José Llugdar, representante del Sindicato del Personal Jerárquico y Profesional del Petróleo y del Gas Privado de la Patagonia Austral, destacó “por sobre todas las cosas, la actividad que esto genera y desarrolla justamente para Río Grande y la gente de Tierra del Fuego”. Además, resaltó los más altos estándares en seguridad y ambiente que conoce de primera mano que la empresa operadora implementa.

Total Austral opera en Tierra del Fuego, junto a sus socios Wintershall DEA Argentina S.A. (37,5%) y Pan American Sur S.A. (25%); la concesión Cuenca Marina Austral 1 (CMA-1), que incluye los yacimientos en tierra Ara y Cañadón Alfa, así como también Hidra, Kaus, Carina, Aries y Vega Pléyade.

Para esta consulta 1/23 se registraron 448 inscriptos provenientes de diversos sectores: además de autoridades y funcionarios, instituciones como el IAPG, la SPE, ARPEL, cámaras y representantes de la comunidad científica, organismos de trabajadores, sindicales, académicos, ONGs y miembros de la sociedad civil.

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