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Argentina duplicó el superávit comercial de enero.

El superávit de febrero duplicó al logrado en enero que fue de US$ 785 millones.

La economía de Argentina mostró en febrero de 2024 su tercer superávit comercial consecutivo, con un saldo positivo en la balanza comercial de US$ 1.438 millones, el mayor desde octubre de 2022.

Esto implica una expansión de US$ 1.228 millones respecto al leve superávit comercial de US$ 210 millones registrado en febrero de 2023.

En el acumulado enero-febrero de 2024, se ha obtenido un superávit de US$ 2.223 millones, superior al déficit de US$ 232 millones en el mismo tramo de 2023. 

  • Importaciones

La mejora del resultado comercial de febrero ocurrió debido a una fuerte caída de los valores importados, que totalizaron US$ 4.093 millones y se redujeron en un 18,6% versus el mismo mes de 2023, un ritmo de caída anual similar al de diciembre (-15,2% i.a.) y enero (-14,1%), y en los tres meses fue claramente mayor al de noviembre (4,9%).

  • Exportaciones

Por su parte, las exportaciones, pese a la caída en los precios en valor, crecieron 5,6% anual en febrero, luego de un incremento del 9,6% en enero, llegando a US$ 5.531 millones, y marcando sus primeros dos meses con incrementos consecutivos desde octubre-noviembre de 2022.

  • ¿Qué pasó con las exportaciones?

Los valores exportados crecieron un 5,6% interanual en febrero, pasando de ventas externas por US$ 5.239 millones en dicho mes de 2023 a US$ 5.531 millones en el segundo mes de este año y marcaron su segundo incremento anual consecutivo en quince meses.

En el acumulado anual, las exportaciones han crecido un 7,5% interanual versus enero-febrero de 2023. 

Los valores exportados en febrero crecieron exclusivamente por efecto cantidades (+13,5% no interanual), ya que los precios se redujeron un 6,8% anual en el mismo mes.

Esta dinámica es la misma que en enero, cuando una suba en las cantidades de 21,1% fue parcialmente moderada por una caída de precios (-9,4%).

Es decir que se está viendo una recuperación genuina de los envíos externos, aunque generalmente impulsada por la reversión de la sequía

  • Productos primarios

Desagregando por rubro, puede verse aquellos ligados al agro fueron los únicos que presentaron subas: los valores enviados de Productos Primarios crecieron en 18,8%, con un incremento en los volúmenes de 24,0% interanual, y una baja de precios de 4,3%.

En detalle, se vió un aumento fuerte en los valores exportados de Cereales (39,9% i.a.), que da cuenta de casi la totalidad del incremento en el segmento en cuestión (US$ +282 millones de Cereales, vs. Una suba de 228 millones en Primarios).

Contrariamente, las Semillas y Frutos Oleaginosos presentaron una baja de 38,1% anual, mostrando que el complejo sojero no termina de recuperarse.

A su vez, las exportaciones de Manufacturas de Origen Agropecuario aumentaron, aunque solamente un 8,0% versus febrero de 2023, con una suba significativa de cantidades (27,7%) y una baja profunda en los precios (-15,5% interanual). 

Las exportaciones atadas a la industria vieron un desempeño negativo: las Manufacturas de Origen Industrial cayeron un 3,9% interanual, debido a bajas tanto en valor como en precio y cantidades: los volúmenes exportados bajaron un 2,9% en las cantidades y los precios lo hicieron en un 0,5%.

A su vez, el rubro “material de transporte terrestre” (que captura buena parte de dinámica del sector automotor), registra una contracción del 1,4% interanual de los valores exportados en febrero.

El grueso de la caída, entonces, puede explicarse por la profunda disminución en la actividad industrial metalmecánica, dado que los valores exportados de “metales comunes y sus manufacturas” se redujeron en un 21,7% interanual.

Por otra parte, el rubro de Combustibles y Energía mostró una caída modesta en febrero, de 3,2% interanual, aunque explicada por un descenso de precios (-2,6%) con cantidades estables.

  • Perspectivas

Por fuera de las expectativas para cada mes en particular, los últimos dos meses pueden dar un pantallazo de cómo se desempeñaría el sector externo en 2024.

Primero, las exportaciones se recuperarían significativamente en todos los rubros, aunque con heterogeneidades por sector: serían protagonistas el agro, debido a la reversión del efecto sequía, así como la minería, el petróleo, y el gas natural, gracias a la culminación de inversiones realizadas en los últimos años.

La dinámica de precios internacionales, que por el momento se anticipan a la baja, podrán amortiguar parcialmente esta tracción. 

En cuanto a las importaciones, las cantidades demandadas traccionarán a la baja debido a la debilidad de la demanda interna y la contracción del sector industrial y de la construcción, así como por la mayor competitividad real del peso, aunque el fin de las restricciones permitirán la recuperación cuando se termine la fase recesiva, según se estima en el segundo trimestre.

Este efecto será modesto, y no revertirá el superávit comercial, que se anticipa en torno a US$ 15.000 millones para todo el año. 

Fuente: Abeceb

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