Brasil: la exportación de cachaça a 66 países creció 62% en valor y 26% en volumen

BRASIL CHACHACA

La cachaça de Brasil se exporta a 66 países, principalmente a Estados Unidos, Alemania, Portugal e Italia.

Brasil celebró este martes 13 de septiembre el Día Nacional de la Cachaça con datos significativos de crecimiento de 62,49% en el valor y 26,84% en el volumen de las exportaciones a 66 países, además de una continuidad en el impulso del consumo en el mercado interno.

La variación porcentual de las exportaciones de cachaça registró un crecimiento de 62,49% alcanzando un valor de US$ 13,10 millones en el período de enero a agosto de 2022, en comparación con el mismo período de 2021 mientras que en volumen las ventas externas crecieron 26,84% con 5,9 millones de litros, según las cifras compiladas por el Instituto Brasileño de la Cachaça (IBRAC) en base a datos de Comex Stat, dependiente del Ministerio de Economía del Brasil.

En 2021, en ese mismo período se exportó por US$ 8.066.791,00 en valor, y 4.710.930 litros en volumen.

La información de Instituto Brasileiro da Cachaça (IBRAC), entidad representativa del sector indica que, actualmente, la cachaça es exportada a 66 países, principalmente a Estados Unidos, Alemania, Portugal e Italia.

En el mercado interno, o tamaño del mercado de la cachaça también presenta una evolución positiva. De acuerdo al informe anual de bebidas alcohólicas de Euromonitor International, lider global en investigaciones de mercado, en la comparación entre 2021 e 2020, el crecimiento fue de 30% en valor (actualmente, un mercado de R$ 15.550 millones) y 18% em volume (totalizando 469.725,2 millones de litros).

“Los números ameritan ser celebrados y la perspectiva del sector, tanto en el mercado externo, como interno, es cerrar el año con datos superiores a 2021. Pero es importante alertar que las pérdidas enfrentadas durante la pandemia fueron significativas, en especial en el mercado interno, cuando el cierre de bares, restaurantes, y otras restricciones al consumo de bebidas alcohólicas, afectó directamente el mercado de la cachaça, que tiene en esos locales sus principales canales de distribución. Esperamos que el escenario positivo continue, y que tengamos más motivos para celebrar”, enfatizó Carlos Lima, diretor executivo do IBRAC.

“Este momento pos-pandemia puede ofrecer grandes oportunidades para el sector de cachaça, en la medida en que los consumidores se sienten mas confortables al volver a consumir em bares y restaurantes. Tendremos además un verano distinto, con la Copa del Mundial de Fútbol y el regreso del carnaval, creando un escenario que, si es bien trabajado, podemos ver la cachaça ser apalancada como uno de los grandes destilados del mercado nacional”, destacó Rodrigo Mattos, analista de Alcoholic Drinks da Euromonitor International.

Cachaça: de la colonia a la Independencia de Brasil

El Día Nacional de la Cachaça es una iniciativa de IBRAC, y ya viene siendo celebrado desde 2009 por el sector productivo. El proyecto de ley que establecerá el 13 de septiembre como Día Nacional de la Cachaça está em tramitación en el Senado Federal.

La elección de la fecha tiene un motivo histórico: el 13 de septiembre de 1661 se produjo la famosa rebelión de productores brasileños llamada Revuelta de la Cachaça.

En 1635, cuando los portugueses notaron que el mercado de la cachaça crecía y el producto tomaba el lugar de la bagaceira, producido por ellos a partir del bagazo de la uva, el rey de Portugal prohibió la producción y la comercialización de la cachaça. En esa época, los portugueses llegaron a amenazar a los productores con la deportación, incautación del producto y destrucción de los alambiques. El escenario culminó en el movimiento liderado por los productores, lo que abrió el camino para la legalización de la bebida por Orden Real.

“La cachaça es símbolo de la resistencia del pueblo brasileño, porque enfrentó preconceptos desde la época del Brasil colonial, período en el que tuvo su comercialización prohibida en varias oportunidades. Con más de 500 años de historia, está ligada a los acontecimientos del Brasil y puede ser considerada el primer destilado de las Américas, porque fue producida, por primera vez, de forma intencional, en algún ingenio de azúcar del litoral brasileño, entre los años 1516 y 1532, aún antes del surgimiento del pisco, del tequila y del ron”, explicó el ejecutivo del IBRAC.

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